viernes, 20 de agosto de 2010

EDWARD HOPPER Y LA FIGURA FEMENINA.III




VERANO 1943. (detalle)


Se podría decir que la relación de Hopper con las mujeres se reduce única y exclusivamente a la presencia de Jo. La vida de este gran artista giró alrededor de la pintura y de su esposa Josephine.



DESNUDO TENDIDO 1927-1929 (acuarela nunca expuesta)

Constituyó un mundo en el que trabajaba para transformar a la única mujer de su vida en todas las mujeres que iban apareciendo en sus lienzos. Y es que no podemos pasar por la obra de Hopper sin analizar la presencia de La Mujer en sus cuadros.



DESNUDO CON PINTOR AL FONDO 1902-1904

La figura femenina aparece constantemente. Incluso en aquellos lienzos en los que el pintor trabaja la soledad, o temas tan reiterados como civilización y naturaleza,


MAÑANA EN CAROLINA DEL SUR 1950

o en aquellos en los que combina exterior-interior y el desnudo femenino como sucede en Una Mujer al Sol.


UNA MUJER AL SOL 1961


La figura femenina aparece en todos ellos con la sensualidad, belleza o sexualidad, según el caso, a flor de piel.
Su amor por la figura de la mujer y por el desnudo femenino permanecerá a lo largo de su obra.Jo seguirá representada, incluso en su madurez, y seguirá manteniendo ese ligero erotismo que siempre tuvo.



LUZ DE LA CIUDAD 1954

Ese erotismo fino y sugerente, en muchas ocasiones formado de pequeños detalles, detalles que sólo puede captar y plasmar un artista de su calibre. Un buen ejemplo lo vemos en "Mediodía".


MEDIODIA 1949


La mujer joven aparece en tacones altos y casi sin ropa. Deja entrever su cuerpo. Parte de su pecho se muestra desnudo y parece sentirse atraída por el sol. Como en tantas ocasiones, se adivina una estancia interior, puede que cerrada, casi a modo de prisión, y el exterior, luminoso y libre en dónde se nos presenta la figura femenina, como en un disfrute de ese espacio abierto que ofrece el horizonte y que semeja la libertad.


También nos presentó a la figura de la mujer desde otro aspecto, como en el escenario de Girlie Show que nos ofrece un strip tease, aunque más bien se diría que el artista “invita” a que cada uno interprete el cuadro a su manera. Simplemente se limita a exponer una “situación”.


GIRLIE SHOW 1941

En las anteriores entradas ya se comentó que Jo fue su única modelo. Así parece ser que lo decidió la compañera del artista y se supone que habría un mutuo acuerdo puesto que Hopper, silencioso y poco amigo de confidencias, había formado su universo alrededor de ella y de su trabajo.

Su modelo “envejeció” a lo largo de la vida artística, esa vida que en íntima unión a la suya personal fue plasmada, cual fotografía, en todos sus lienzos.

Posiblemente por esa presencia femenina en toda su obra, encontramos a la mujer representada realizando trabajos cotidianos,


CASA DE APARTAMENTOS 1923

o en trabajos que eran considerados en aquel tiempo como más bien femeninos.


MESA PARA DAMAS 1930


Hopper realizaba numerosos estudios de cada una de sus obras. En ellos se puede observar el trabajo realizado antes de llevar la pintura al lienzo. Abajo tenemos los apuntes en tiza y lápiz sobre papel para “Sol matinal”. Este estudio se encuentra en la “Collection of Whitney Museum of American Art. Josephine N.Hopper Bequest”.


ESTUDIO PARA SOL MATINAL


SOL MATINAL 1952

De igual manera son numerosos los estudiosos de la obra de Hopper que han investigado sus lienzos desde diferentes ángulos y analizado la obra hasta el infinito.
Un cuadro tiene tantas interpretaciones como observadores, al igual que un libro tiene tantas lecturas como lectores.

En el siguiente apunte Jo posa para el que más tarde se convertiría en el cuadro“Mañana en la Ciudad. En su afán de estudio de la luz, incluso en el apunte, se aprecia el trabajo de luces y sobras que formará el cuerpo.


ESTUDIO para MAÑANA EN UNA CIUDAD

En el detalle de la construcción que vemos abajo, el sol ilumina la construcción, perfilando las formas a la vez que las suaviza y marca un fuerte contraste con el interior en que se encuentra la modelo. Como es su costumbre, interior-exterior quedan fuertemente enfrentados en el lienzo logrando transmitir con la oscuridad una sensación de aislamiento y soledad.


DETALLE del EDIFICIO

No obstante, en este otro detalle, la cara de la modelo (Jo) parece que “siente” esa luz del sol y aun transmitiendo soledad, en mi opinión, también parece que con su mirada forma un puente entre esa naturaleza del astro y el interior de un habitación urbana.


DETALLE DE JO

Finalmente tenemos el cuadro en su esplendor. Uno de tantos en los que el artista combinó espacio interior y exterior, la modelo femenina plena de un fino erotismo, la naturaleza del sol que penetra y la soledad de una habitación en un entorno urbano. Uno de tantos y sin embargo único.


MAÑANA EN UNA CIUDAD 1944


No podemos finalizar esta entrada sin traer hasta aquí alguna imagen de Cape Cop, tantas veces plasmada en sus lienzos con diferentes luces, a la mañana o al atardecer, aunque dicen sus estudiosos que la luz en los cuadros de Hopper es atemporal y que la luminosidad está intrínseca en ellos. No hay duda de que lo podemos constatar en esta “Mañana en Cape Cop”, una mañana iluminada por la figura de la mujer.



MAÑANA EN CAPE COP 1954


Sobre Hopper también en este Blog, las entradas de 1 y 8 de Agosto de 2010 y 5 de Julio de 2012.

NOTA: Para mejor visualizar la fotografía “picar” con el ratón encima de las que interesen.
Para la lectura de entradas anteriores, ir a la ventana de la derecha y “picar” en los años y meses. Se desplegarán los títulos correspondientes a cada fecha.


Fuentes consultadas:
Hopper. Mark Strand. (Edit. Lumen)
Hopper. Ivo Kranzfelder. (Edit.Taschen)
Hopper. Realidad y poesía del mito Americano. Silvia Borghesi. (Edit. Electra)
Fotografía:
Las mismas y archivo propio.

domingo, 8 de agosto de 2010

EDWARD HOPPER y su relación con EL MAR.II





Los temas reiterados a lo largo de la vida.artística de Edward Hopper llegaron a establecer una estrecha relación entre ellos y el artista. Fueron diversos aquellos que se plasmaron en la obra de este gran pintor. Todos ellos han sido objeto de estudio y atención por los seguidores de su pintura.
Por supuesto la relación principal, permanente y duradera se estableció entre Edward y Josephine. Esa que permaneció hasta la muerte que, como mencionaba en la entrada del día 1 de agosto, les llego con un año escaso de separación.



JO (pintando dentro del coche) EN WYOMING 1946

Antes de que Jo entrase en su vida, Hopper no era especialmente ordenado con su trabajo, ni en el desarrollo del mismo, ni en las exposiciones. Fue su esposa la que se iba a ocupar de las exposiciones, ventas y la que transcribiría todos los acontecimientos que marcarían la obra de su marido.



MAPAS DE CAPE COD realizados por Jo en 1955




Además de esa relación de Comisaria y de la que adquirió como modelo, hubo también una relación artística. En 1924, ambos pasan su luna de miel en Gloucester y pintan juntos, algo que ya habían hecho anteriormente.

FARO AL ESTE 1923 (Acuarela)


En ese periodo Hopper comienza a utilizar la acuarela en una técnica libre y en ello Jo fue su inspiradora. Ella también utilizaba esa misma técnica Jo era amante de temas como barcos de vela, iglesias, árboles, todos ellos en un formato vertical. Por el contrario Edward prefería los edificios victorianos, y un formato horizontal.



EL PUERTO DE GLOUCESTER 1926 (Acuarela)


Ya se ha mencionado anteriormente que ella dejaría los pinceles para centrarse en la actividad de Comisaria.
Como decía, fueron muchos los temas recurrentes en la obra de Hopper. Muchas las relaciones especiales que estableció a lo largo de su profesión. La de la figura femenina, los temas urbanos, los rurales, la dicotomía interior-exterior, la soledad y otro muy importante que es el que hoy traigo hasta aquí: El mar.




EL FARO DE HIGHLAND EN NORTH TRURO 1930


Los motivos de sus cuadros tenían relación con lugares en los que el había estado, con los que había establecido un símbolo. Es por eso que también en el tema del mar que abarca paisajes, veleros o sus famosos faros, los lugares son fácilmente reconocibles.



COLINA CON FARO 1927


Este cuadro que actualmente se encuentra en el Dallas Museum of Fine Arts es un óleo sobre lienzo de 71,8 x 100,3 y fue pintado en 1927. En el se reconoce la "Lighthhouse Hill".

Pero posiblemente el Faro que en más ocasiones hemos asociado con Hopper es el que pintó en 1929 y que se encuentra en el Metropolitan Museum of Art. de N.York.


EL FARO 1929

En esos lienzos que tenían como tema el faro Hopper podía investigar aquello que más le atraía. El efecto de la luz sobre las cosas.


EL FARO 1929 (Detalle)


En el detalle podemos apreciar con que maestría logró una luminosidad carente de calor. Cómo utilizó el color blanco para representar el reflejo de la luz y esa frialdad que, unida al paisaje, transmite una sensación gélida y de soledad.



BLACKHEAD, MONHEGAN 1916-1919

También tuvo al mar como tema de confrontación con la tierra. Encontramos esos paisajes antes de la aparición de los Faros. Se podría decir que los primeros paisajes eran aún más puros y salvajes y que con los Faro ya nos trae la presencia del ser humano, pero eso sí, siempre en relación con el mar.
Son como digo pinturas simples pero llenas de fuerza. El mar y la tierra en un encuentro. Apenas pinta el horizonte. Simplemente lo que está delante.



ROCAS Y MAR 1916 – 1919

Este boceto de “Rocas y Mar” así como el de “Cala Rocosa” pintado en la misma época, son un avance de la naturaleza que iba a estar siempre en su obra. Ambos nos dejan la tierra y el mar de Monhegan Island con toda su belleza y crudeza plasmada en ambos óleos.


CALA ROCOSA 1916-1919


Como no podía ser de otra manera, el mar y el hombre tendrían que encontrarse y así nos los presentó, primero en “Velero”, un óleo sobre lienzo de 61 x 73,7 que no tendría demasiada importancia en la carrera del artista, sino fuera por ser el primer cuadro que vendió E.Hopper.



VELERO 1911


En una primera versión, el velero navegaba hacia una dirección, pero el artista lo cubrió con pintura y lo puso a navegar hacia el lado contrario. Fue expuesto en el “Armony Show” de N.York en 1913.
Y como segundo cuadro con tema “hombre-mar” os dejo un óleo pintado en 1939. Se trata de un lienzo titulado “Resaca” o “Mar de Fondo” que se encuentra en The Corcoran Gallery of Art de Washington.

Me he remitido a la crítica que hace Mark Strand (mencionado en la anterior entrada del 1 de agosto)
Os resumiré lo que nos cuenta y lo que a mi me dice este cuadro.



MAR DE FONDO 1939

Dice Strand…”Representa una escena de inusual serenidad. El mar tiene la ondulante solidez de una escenografía y la barca parece inmóvil… la quietud que predomina en la pintura no parece amenazante. La geometría del cuadro es sutil. Dos triángulos se intersectan, cada uno imposibilita el movimiento del otro. El más fuerte de los dos parte de la vela de la barca y continúa por el mástil, hasta la boya, que a su vez apunta hacia el arpón colocado en cubierta; el otro está formado por los cirros que en forma de V se alejan a través del cielo. Lo que realmente cuenta es el triángulo formado por la barca y la boya. Es lo que hace que el cuadro sea estático. La embarcación y la boya están trabadas entre sí, inmovilizadas en la propia figura que conforman. También las personas que están en la barca y que miran hacia la boya contribuyen a esa sensación de inmovilidad. Su “mirada” no va más allá, ni se sale del lienzo. Es un puente entre barca y boya. Hay un equilibrio total entre movimiento e inmovilidad.

Lo que a mí me dice este cuadro:

En general, y sin entrar a analizar la técnica empleada por el artista, coincido con Strand. Yo también encuentro en este cuadro una total serenidad. Es tan fuerte que se palpa y es inusual porque tratándose de una escena de un barco enfrentado al mar bravo, y sobre todo, acostumbrados como estamos a una naturaleza que intranquiliza en los cuadros de Hopper, es algo atípico. Pero esa sensación es la que yo palpo. Serenidad y luminosidad. Posiblemente esta última ayuda a establecer un clima de tranquilidad y quietud. Me transmite reposo y momentos de alegría. Una sensación de paz y de clima lúdico. Un ambiente de disfrute. En esta ocasión el mar es amigo para compartir recreo, no naturaleza amenazante.

Todos los temas que trabajó Hopper resultan de interés. Son, en general, temas que nos llevan a la reflexión, al encuentro con nosotros mismos y con la vida cotidiana, pero sin duda el tema del mar con su entorno, para mí ha resultado uno de los más atractivos.

Sobre Hopper también en este Blog las entradas del 1 y 20 de Agosto de 2010 y 5 de Julio de 2012

NOTA: Para mejor visualizar la fotografía “picar” con el ratón encima de las que interesen.
Para la lectura de entradas anteriores, ir a la ventana de la derecha y “picar” en los años y meses. Se desplegarán los títulos correspondientes a cada fecha.




Fuentes consultadas:
Hopper. Mark Strand. (Edit. Lumen)
Hopper. Ivo Kranzfelder. (Edit.Taschen)
Hopper. Realidad y poesía del mito Americano. Silvia Borghesi. (Edit. Electra)
Fotografía:
Las mismas .
Catálogo del 350 obras del MOMA de N.York.
y archivo propio.

domingo, 1 de agosto de 2010

EDWARD HOPPER. Pinturas con alma.I



Un artista estuvo presente en todos los apartados temáticos de “Realismos modernos” del Thyssen. Lo pudimos encontrar con paisajes rurales, con los industriales, fue magistral con los retratos íntimos y hasta con el lienzo “vacío”, y nos mostró la ciudad americana como nadie.

LA CIUDAD 1927

En todos ellos nos mostró el dominio de técnica y tema y algo mucho más importante, la capacidad de sacar “el alma” del cuadro. A ello me refería en una pequeña entrada de este blog, de título “El alma de las pinturas”, el día 29 de Marzo de 2009, entrada que ilustré con el cuadro del Faro que hoy encabeza el Blog.
El artista que tenía esa capacidad de sacar “el alma” hasta de una habitación, incluso vacía, no podía ser otro que Edward Hopper.


DIGRESIÓN FILOSÓFICA 1959

Porque hay algo que no se aprende en las Escuelas de Bellas Artes y eso es mostrar “el alma” del cuadro hasta despertar en el espectador las emociones. Eso es algo difícil de aprender. Es un don que se posee o no se posee y Hopper era el maestro en ese Arte.


AUTOMAT 1927


Posiblemente se ha dicho, escrito, publicado y fotografiado vida y obra de Hopper desde todos los ángulos posibles. Su vida, artística y personal, se ha descrito con ensayos, con ilustraciones, en fin, de todas las maneras que se puede realizar una recopilación de la vida de una persona. Así que poco voy a poder añadir aquí.
Si algo tiene de dificultad un blog es la limitación del espacio. Si añadimos, como es el caso, una gran obra y una enorme admiración por ella, el espacio se me hace mucho más pequeño porque además es sumamente difícil hacer una selección de la amplia producción que realizó en sus diferentes temáticas.
Os dejo, un pequeño resumen que nos acerca a los diferentes temas que el trabajó, y algunas pequeñas anécdotas de su vida. Siempre faltará espacio y me faltaran palabras para expresar lo que me hace sentir su pintura.


BLOQUES DE APARTAMENTOS RÍO HARLEM 1930

Nació Hopper en 1882 a orillas del río Hudson. Con 5 años dibujaba y a los 10 firmaba sus dibujos, lo cual le diferenciaba de otros niños de su edad. Poco se sabe de su vida ya que fue muy poco proclive a dar detalles sobre si mismo.
Estudió en la escuela de la localidad y quería ser artista. Sus padres le apoyaron pero le aconsejaron estudiar ilustración o artes gráficas para asegurarse la existencia.
Así que continuó su formación en una escuela de Ilustración y más tarde, en el New Cork School of Art, estudió grabado y pintura. Algunos de sus compañeros como Rockwell Kent y George Bellows serían famosos antes que él.
Pasó un año en París, conoció la obra de Cézanne y Gaugin y también la de Juan Gris que en esa época llegaba a la capital parisina. Pero Hopper no parecía muy impresionado por aquella vanguardia. Marcha a Londres y conoce la obra de Turner, en Amsterdan la de Rembrand y regresa a N.York. Salvo una breve visita a Berlín, Bruselas y España no volvería a Europa y en 1920 comienza a abordar los temas americanos. Sus paisajes del estado de Maine, sus costas y carreteras le harían famoso.


CAPE COP EN OCTUBRE 1946

La civilización en oposición a un paisaje salvaje y a la naturaleza en estado puro, iba a ser otro tema recurrente en su obra. Cuando es invitado a exponer en el Brooklyn Museum de N.York, su recientemente retomada obra en acuarela logra tal éxito que se puede permitir dejar el trabajo de ilustrador para dedicarse de lleno a la pintura. Junto a su mujer, también pintora, adquieren un estudio en Massachussets dónde pasarán los veranos.


ATARDECER EN CAPE COP 1939 (DETALLE)

La factura adquirida por Hopper en la década de los 20, cuando contaba 42 años, ya no iba a cambiar. Era un estilo individual y genuino. No sólo en lo que se refiere a forma y textura sino sobre todo a la temática. Rechazó el arte moderno europeo siguiendo un estilo realista propio con esos temas tan americanos.


PASO A NIVEL 1922-23

Además de su temática de civilización opuesta a naturaleza, trabajó con frecuencia el tema de la mujer recluida en un interior. Vestida o en total desnudez, nos presenta mujeres en situaciones cotidianas o íntimas, llenas de misterio, pero en absoluto sensacionalistas. El vacío como soledad es también tema presente en su obra.


HABITACION DE HOTEL 1931

Tuvo un gran dominio de la luz y las sombras, del dibujo y la perspectiva adquirido en su formación de ilustrador ,de la que había vivido mucho tiempo.
Como comentaba en la introducción de hoy, mucho y muchos han escrito sobre la obra del gran artista americano, pero creo que hay que mencionar especialmente al poeta canadiense Mark Strand. En español tenemos un pequeño libro con el título de “Hopper” (Editorial Lumen) en la que Strand nos comenta una treintena de cuadros del pintor. Es un ensayo profundo de su obra.

OFICINA DE N.YORK 1927

Voy a traer hasta aquí alguno de sus comentarios y así mismo, la reflexión que yo misma realizo sobre algunas obras de Hopper, porque no hay duda de que el Arte de la pintura, como el de la literatura, tiene muchas lecturas. Tantas como espectadores o lectores.
Comenzaré con el cuadro La Escalera, posiblemente uno de los mejores lienzos para representar ese contraste entre interior (seguro) y exterior (desconocido) y la inquietud que transmite.

LA ESCALERA 1919

Se trata de un lienzo pequeño y de los más misteriosos de Hopper. Es una escalera en el interior de una casa que nos hace dirigirnos hacia el exterior. Nos sitúa en su parte superior y de cara al exterior en una invitación a dejar el espacio interno. Al fondo, la puerta abierta parece atraernos. Lo que nos espera es una naturaleza muy propia de Hopper. Un paisaje nada “sosegador”. Como acostumbra, la naturaleza que nos ofrece no es apacible.
El cuadro transmite , al menos a mi me transmite, una sensación de opresión, puesto que la escalera empuja a salir, te echa de la casa, pero lo que nos ofrece, aquello que está enfrente de la puerta, es muy inquietante.
El pequeño óleo, sin ningún personaje, nos “mete” dentro de él. Nos coloca al principio de esa escalera y nos hace partícipes de esa necesidad de salir de la casa y del temor de lo que tenemos enfrente.

Y en su recurrente oposición entre naturaleza y civilización traigo un lienzo que “interpreto” de forma muy diferente a la de la mayoría de los críticos que lo han estudiado. Se trata de “Habitación junto al mar”.


HABITACION JUNTO AL MAR 1951

“Habitación junto al mar” es un óleo de 73,7 x 101,6 en el que Hooper nos muestra el contraste entre la naturaleza intacta, y la civilización (la habitación) abandonada (vacía). La confrontación según los críticos tiene mucho de surrealista.

Lo que me dice el cuadro:
La naturaleza, en este caso representada por el mar que asoma al borde de la puerta abierta, no me sugiere la naturaleza amenazadora de otros cuadros de Hopper. Creo que es el único, o uno de los pocos cuadros de este pintor, en que su naturaleza no despierta en mí inquietud. A pesar de la inmensidad de un mar que se muestra hostil, no hace que sienta temor hacia esa naturaleza en estado puro. Todo lo contrario, se me presenta luminosa, porque luminoso es el lienzo. El sol entra en la habitación pero también parece que con él penetra el azul del mar. En el fondo de la habitación que efectivamente está “abandonada” por la persona, se deja entrever parte de unos muebles y el lado izquierdo de un cuadro que cuelga en la pared. Más que de abandono, me transmite una sensación de refugio y de quieta “espera” del “ausente”. Casi diría que me tranquiliza la presencia de esos muebles y de esa luminosidad.
En una palabra, mis emociones ante este cuadro son totalmente opuestas a las que, según los críticos, el pintor quería despertar.

Otro lienzo de similar temática es: “Sol en la habitación vacía”.

SOL EN LA HABITACIÓN VACIA 1963

Se trata de un óleo sobre lienzo de 73 X 100, es decir de similar formato al anterior. El contraste entre interior y exterior es más difuso, apenas existe. La luz penetra por la ventana que deja entrever una naturaleza de tonos cromáticos similares al interior de la habitación totalmente vacía. En éste ni siquiera aparecen los muebles que hemos visto en “Habitación al mar”. El vacío es total. Parece ser que el pintor en un principio tenía proyectado introducir una figura que finalmente no pintó.

Lo que me transmite el cuadro:
Desolación, una sensación de abandono, de tristeza, y de inseguridad. Un vacío total de la casa que hace sentir en mí un vacío interior y delante “la amenaza”. Lo poco que se deja ver por la ventana de esa naturaleza externa, no invita a que salgamos a ella. Es la naturaleza inquietante muy propia de Hopper y que en mi opinión transmite esa intranquilidad a todo el lienzo y también al espectador.
No sé si era ese el objetivo del artista, pero el vacío es tan poderoso que ni siquiera la luz del sol puede remediar la sensación de soledad.

Y finalmente retomo de nuevo la oposición naturaleza-progreso con un cuadro que se puede admirar en el MOMA de N.York. Se trata de "Gasolina" y de él os dejo el comentario que hace Mark Strand.

GASOLINA 1940

Dice Strand que en “Gasolina”, los árboles parecen “acechar”. Es una arboleda que está justo enfrente de la carretera, la larga carretera, en dónde se encuentra la estación de servicio. Es, según Strand, un telón de fondo para la pequeña Gasolinera y para el empleado que la atiende. La entrada de la estación está delimitada por las bombas de Gasolina y por un edificio pequeño iluminado en el que se lee un letrero luminoso “MOBILGAS”. Dice también que la presencia del empleado no resta angustia a lo que parece anunciar el cuadro: el futuro, el paso del tiempo, por mucho que pospone la noche, iluminando y haciendo el día más largo.

Lo que a mi me transmite el cuadro:
Ante todo, la larga carretera que se pierde en el infinito, efectivamente nos anuncia el futuro, el paso del tiempo, pero sobre todo transmite (a mi personalmente) una angustia hacia lo desconocido.
La arboleda que en opinión de Strand, es el telón de fondo, yo la veo como un “telón” en el lienzo, pero también como “la naturaleza amenazante” siempre presente en la obra de Hopper. Si para muchos artistas y no artistas, la naturaleza transmite placidez y equilibrio, en la obra de Hopper yo jamás los he encontrado, todo lo contrario, esa masa de árboles, es más que un telón, es como un muro “amenazante” que nos empuja a seguir la carretera porque evidentemente no “invita” a adentrarse en la masa de árboles. En cuanto al pequeño edificio de la gasolinera muy iluminado, tanto que da luz a todo el cuadro, a mi me transmite una “ligera” sensación de seguridad.
Es el “foco” iluminado y habitado ante la incertidumbre del infinito de la carretera y la “amenaza” de la naturaleza. No obstante, tanto este “remanso” como la figura humana del hombre de la Gasolinera, transmite una “tranquilidad” muy tenue. Y en esto coincido con Strand.



FARMACIA 1927

Y por hoy termino la entrada dedicada a Edward Hopper. Una entrada que podría haber alargado hasta el infinito porque cada acuarela, cada óleo, cada dibujo o apunte de este artista, tiene la fuerza y el don de hacer reflexionar, no sólo sobre su obra, sino sobre la naturaleza, la ciudad, y sobre la vida cotidiana de las personas.




EDWARD Y JO PINTANDO EN SU ESTUDIO EN 1964

Edward Hopper murió en 1967 en N.York. Apenas un año después, exactamente diez meses, le siguió su esposa Josephine.

Josephine Hopper, de soltera Nivison, también pintora, dejó la pintura cuando se casó con el que sería su marido hasta la muerte. No volvió a tomar los pinceles, pero trabajó como Comisaria de la obra de su marido y sobre todo fue su única modelo. Según dicen, no quería que ninguna otra mujer posará para Edward.



DOS COMEDIANTES


En el último cuadro que pintó Hopper, "Dos comediantes", se representa a el mismo junto a Jo sobre un escenario en una reverencia ante un público imaginario.

Sobre Hopper también en este Blog, las dos siguentes entradas de 8 y 20 de agosto 2010 y la de fecha 5 de Julio de 1012.




 

A finales de Noviembre de este año 2014, a la edad de 80, años fallecía en Nueva York el poeta Mark Strand.

 Me preguntaréis por qué traigo hasta aquí  esta noticia, siendo como es nuestro Blog un lugar fundamentalmente dedicado al Arte.

Dejando aparte que considero la escritura un Arte con mayúsculas, pero que bien es cierto que solo dedico entradas sobre lectura en ocasiones muy puntuales, hoy tengo que dar la noticia y más a los pies de esta Entrada dedicada a Hopper, porque Strand, este gran poeta y también pintor, escribió un precioso libro sobre este artista. (Hopper. Editorial Lumen)

Cuando me refiero a Hopper no puedo por menos que pensar en este librito del que me serví  para las diferentes entradas, además de la presente, sobre Hopper realizadas en este Blog y  de la misma forma cuando leí la noticia del fallecimiento de Mark Strand, me vino inmediatamente toda la obra  de Hopper hasta mi.

También en algunas de las recomendaciones de lecturas estivales recomendé este pequeño libro que nos explica como ninguno la obra del pintor americano.Después de leerlo  es difícil separar a Strand de Hopper y a Hopper de Strand.

Mark Strand nació en 1934 en Canadá.  Obtuvo el grado de Bachiller en Artes y estudió pintura en la Universidad de Yale así como poesía italiana. Su vida como profesor le llevó a impartir clases en numerosos países. Recibió numerosos y prestigiosos premios.

Autor de una poesía nostálgica, evocadora de prados y paisajes yo le recuerdo, si me lo permitís, por ese precioso ensayo sobre Hopper, pintor que tanto admiró.




NOTA: Para mejor visualizar la fotografía “picar” con el ratón encima de las que interesen.
Para la lectura de entradas anteriores, ir a la ventana de la derecha y “picar” en los años y meses. Se desplegarán los títulos correspondientes a cada fecha.



Fuentes consultadas:
Hopper. Mark Strand. (Edit. Lumen)
Hopper. Ivo Kranzfelder. (Edit.Taschen)
Hopper. Realidad y poesía del mito Americano. Silvia Borghesi. (Edit. Electra)
Realismos Modernos. Varios autores. (Para la Expos. del mismo nombre del Thyssen de Madrid)
Catálogo : 350 obras del MOMA de N.York.
Fotografía: Las mismas y archivo propio.