En Agosto de 2010, concretamente
los días 1,8 y 20, dediqué tres Entradas en este Blog al pintor Edward Hopper.
Aunque en un principio pensé que no volvería a escribir más sobre su obra, hoy
confirmo aquello que muchas veces he pensado: nunca es suficiente cuando nos
referimos a Hopper.
EL "MARTHA MACKEEN"
Admiré su obra en el MOMA y en el
MET de N.York, tuve oportunidad de contemplar alguno de sus cuadros en una
colectiva en Barcelona, me he aproximado a todo museo que “colgaba” obras
suyas, he leído bastante, por no decir casi todo lo publicado sobre este
artista y casi estaba segura que el blog ya tenía suficiente con lo escrito,
pero como arriba indico, no ha sido así.
El mundo rural de Hopper
Me resulta, imposible no volver a
escribir sobre Hopper. Esta vez no será tanto sobre su obra sino sobre la
propia exposición, porque si en general el Museo Thyssen de Madrid no me
decepciona, esta exposición ha hecho que caiga rendida a sus pies. Una vez más
contenedor y contenido alcanzan un alto grado de calidad. Ante todo, gracias a
los que nos han dado la oportunidad de admirar una de las más completas
exposiciones de la obra de Edward Hopper.
El mundo urbano de Hopper
No voy a traer hasta aquí muchos
de los lienzos que cuelgan en la exposición ya que sería repetir los que en su
día subí. Os remito a las fechas arriba indicadas, el 1, 8 y 20 de agosto del
año 2010, (en la columna de la derecha del blog), dónde encontraréis muchos de
los cuadros que ahora podemos admirar en el Thyssen. La Entrada de hoy tiene como
objetivo subir algún cuadro más de los que antes no se mostraron y sobre todo
llamar vuestra atención para que no perdáis la oportunidad de visitar el museo
y de “viajar” a través de la vida de este pintor por el país que fue su patria
y que él como ninguno supo plasmar. El país físico, las ciudades y los rincones
rurales de América, y su país interior, esas soledades, silencios y vacíos que
transmite toda su obra.
PAVIMENTOS DE N.YORK 1925
La exposición lleva un orden
cronológico de la vida artística de Hopper. Sus muchos grabados realizados en
su época de ilustrador, una etapa que él no amaba y que no perdía ocasión de
así decirlo, fueron una buena base para su obra posterior. A mi personalmente
me dejaron fascinada sobre todo dos de ellos: “Sombras nocturnas”, realizado en
1927 y “Cat bot” de 1922.
El primero, con una perspectiva
cenital, nos muestra un dominio de las luces que parece imposible lograr con
esta técnica. El personaje caminando entre luz y sombra nos hace sentir sus
pasos en la solitaria calle.
CAT BOT
De igual forma en el grabado “Cat
bot”, de tema marinero, consigue, simplemente con el claro-oscuro, el mismo “movimiento”
que logra con sus luces y colores en los óleos y acuarelas de la misma temática.
Magníficos ambos.
Otro motivo para no perderse esta
exposición ya que los grabados de Hopper posiblemente sea lo menos conocido de
su faceta artística. También es interesante el conjunto de carteles ilustrados
que realizó en esa etapa y que dan muestran de su dominio del dibujo.
LA CASA LOMBARD. Acuarela
La acuarela, muy presente en la
exposición, fue posiblemente la técnica con la que más próximo estuvo a su
mujer, también pintora, artísticamente hablando. Se dice que hubo entre Jo y él
una cierta “rivalidad”, si se puede llamar así, y que fue ella la que más
ejerció esta técnica haciendo que Hopper se decidiera finalmente a ponerla en
práctica.
Sobre la ciudad, los edificios,
las habitaciones con personajes solitarios que nos transmiten una soledad acompañada,
poco os añadiré que no haya dicho en los artículos mencionados anteriormente.
ROOM IN NEW.YORK 1932
Se puede admirar en la exposición
uno de los pocos lienzos en los que los personajes son representados en una
relajada charla, algo no habitual puesto que sus personajes permanecen, en
general, en una “soledad en compañía” Se trata de la obra “Conference at Nigth”.
CONFERENCE AT NIGHT 1.949
El tema marinero, sobre el que
también escribí en el blog con el título de “Hopper y el mar” está, como no
podría ser de otra forma, muy presente en el Thyssen. No he podido resistir la
tentación de que encabece esta entrada el cuadro “Martha Mackeen”, uno de sus
maravillosos veleros.
No podemos olvidar que el teatro
y el cine, ambos, estuvieron muy presentes en la vida y en toda la obra de
Hopper. Tan presentes que muchos de los motivos de sus telas han sido tomados
posteriormente para plasmarse en el cine. Hisckot o Altman tomaron sus cuadros
como inspiración .y el amor de Hopper por el cine y el teatro está vivo en
muchos de los motivos de sus lienzos.
TWO ON DE AISLE 1927
El recorrido por la obra de
Hopper termina de una forma original. Una recreación de una de sus más famosas
obras, “Sol de mañana”. El visitante puede “realizar” el encuadre del motivo. Un
marco está colocado sin lienzo. A través de él, encontramos
representada una cama con la figura de la mujer, todo ello a tamaño real. La
mujer está mirando, al igual que en la tela original, hacia una ventana. A
través de ella una película nos muestra el fondo urbano de la ciudad.
El espectador no tiene nada más que colocarse delante del marco para divisar la obra que pintó Hopper. Se han colocado dos peldaños para que el visitante, según su altura, logre el encuadre a la perfección. Un guiño de nuevo a esos “paisajes” cinematográficos del artista.
RECREACIÓN "SOL DE MAÑANA"
El espectador no tiene nada más que colocarse delante del marco para divisar la obra que pintó Hopper. Se han colocado dos peldaños para que el visitante, según su altura, logre el encuadre a la perfección. Un guiño de nuevo a esos “paisajes” cinematográficos del artista.
Había prometido no traer hasta
aquí obras que ya había “subido” anteriormente, pero quiero finalizar la Entrada con un cuadro que
en su día ya os presenté y que considero que es el mejor broche para este corto
artículo. Se trata de “Comediantes”. Es la última obra que pintó el artista muy
poco antes de su muerte. En ella se nos presentan, él mismo y su mujer en el
escenario de un teatro.
COMENDIANTES 1966
La pareja saluda al espectador,
sus manos enlazadas, en una, casi diríamos, premonitoria despedida. Sin ser
posiblemente una de sus mejores obras, a mí particularmente me parece
conmovedora, más sabiendo la fecha de su creación. La considero imprescindible
en cualquier recopilación de su obra y la mejor forma de finalizar este
artículo sobre la exposición.
NOTAS: Para mejor visualizar la fotografía “picar” con el ratón encima
de las que interesen.
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Fuentes consultadas: archivo
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